¿Quién es mejor, Miguel Cabrera o Manny Ramírez?

Ambos suman 19 temporadas en las Grandes Ligas, pero uno ya está retirado y el otro va para su vigésima campaña. ¿Quién es mejor entre Miguel Cabrera y Manny Ramírez? Es una pregunta incómoda, pero necesaria cuando se habla de ídolos latinos en la gran carpa. 

Comencemos por el dominicano, que ya tiene 49 años y cuenta con números de Salón de la Fama. Manny debutó con los entonces Indios de Cleveland en 1993 y en apenas su segunda campaña en las mayores llegó segundo en la votación por el Novato del Año en la Liga Americana. Con el equipo de Ohio asistió a cuatro Juegos de las Estrellas, consiguió tres Bates de Plata y finalizó líder en remolcadas con 165, slugging (.663) y OPS (1.105) en 1999.

En su segundo año con los Medias Rojas de Boston en 2002, obtuvo su única corona de bateo tras agenciar promedio de .349. Dos años después, vistiendo también el uniforme de los patirrojos se apoderó del cetro de cuadrangulares en el nuevo circuito con 43. En esa misma zafra con su bate ayudó a los de Nueva Inglaterra a conseguir la corona de la Serie Mundial. Se retiró en 2011 con el traje de los Rays de Tampa Bay. En total fue a 12 Juegos de Estrellas y ganó 9 Bates de Plata. 

Por su parte, Miguel Cabrera parece tener el camino labrado a Cooperstown una vez decida colgar los spikes. El oriundo de Maracay en Venezuela inmortalizó su nombre al conseguir la triple corona de bateo en 2012 con los Tigres de Detroit, luego de despachar 44 jonrones, remolcar 139 carreras y agenciar .330 para ganar el premio al Jugador Más Valioso de la Liga Americana. No conforme con ello, al año siguiente, el slugger de los Tigres de Detroit repitió al alzarse con el galardón al MVP, luego de ganar por tercera vez al hilo la corona de bateo, esta vez con average de .348.

Cabrera, además, es uno de los miembros del selecto club de los 500 estacazos y está a 13 hits de los 3.000, hazaña que seguramente conquistará este año.     

Salvo por el anillo de Serie Mundial, la carrera de Miguel Cabrera no tiene nada que envidiarle a la de Manny Ramírez.