EL COACH | La medalla dorada de Messi en los Juegos Olímpicos es un título grande; respétenla
El campeonato de la Copa América Brasil 2021 para Lionel Messi se convirtió en el final del discurso maquiavélico de muchos detractores que lo señalaban por no haber podido conseguir un título "grande" con Argentina. Pese a los 35 títulos logrados con el Barcelona, el Mundial Sub 20 de 2005 y la medalla de oro lograda en los Juegos Olímpicos Pekín 2008, muchos lo seguían culpando de no haber podido "ganar" con su país, esto pese a ser el máximo goleador histórico de su selección, con 76 dianas.
Más allá que la grandeza de Messi no esté en discusión, lo logrado por el 6 veces ganador del Balón de Oro en los Juegos Olímpicos merece más respeto. Muchos son los atletas que sueñan con defender a sus naciones en las citas olímpicas, las cuales son de los mayores eventos del planeta. La presea dorada de Messi no es defendida como debiese, instaurando una polémica de si la reciente Copa América es realmente el primer título grande del capitán del Barcelona con la albiceleste.
Para Messi participar en aquellos Juegos Olímpicos, a sus 21 años, era un sueño de tal magnitud que no tuvo reparos en pelear con el Barcelona con el fin de asistir a la justa. En ese momento el argentino no tenía la importancia ni la grandeza que hoy posee, por lo que estaba dispuesto a todo con tal de ponerse la albiceleste en Pekín.
"Son los Juegos Olímpicos. Es una oportunidad única que tiene un jugador en su carrera. Tengo la posibilidad de ser recordado y me encantaría vivir esta experiencia. Creo que el club entiende lo que pienso", dijo Messi a ESPN en aquel entonces.
El Barcelona dio su batalla legal y hasta apeló al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) de la FIFA con tal de tener a Messi en la ronda preliminar de la Champions League. Al final fue el entrenador Pep Guardiola quién liberó a Messi, yendo en contra del presidente Joan Laporta y el director Txiki Begiristain con tal de tenerlo feliz en el equipo.
Ir a los Juegos Olímpicos fue un antes y un después en la carrera de Messi, quien en su regreso al Barcelona ganó la LaLiga, la Champions League, la Copa del Rey, la Supercopa de Europa, la Supercopa de España y el Mundial de Clubes; el mítico "sextete".
Messi lo dio todo por su país en aquel entonces, dejando a un lado al Barcelona y a cualquiera que le dijera que ir a los Juegos Olímpicos era una mala idea. Junto a Juan Román Riquelme, Sergio Agüero y Ángel Di María se colocaron en lo más alto del podio. Todo valió la pena.
El oro de Messi en Pekín es un título grande por todo lo que envolvió, amén de la importancia que tiene la cita olímpica en el mundo. Basta de discursos sin sentido. Más allá de que el fútbol de los Juegos Olímpicos se practique en su mayoría con jugadores jóvenes (el límite de edad es de 23 años y sólo se permiten 3 futbolistas mayores en la nómina), no deja de ser un torneo de primer nivel.
Respetemos más a los Juegos Olímpicos.